La segunda generación del SUV Dodge Durango también fue la primera en introducir el motor Hemi de 5.7 litros en la alineación. Tenía cinco versiones diferentes, comenzando con la básica, 4x2, SE, que presentaba opciones básicas como cierre centralizado, aire acondicionado y un reproductor de CD de seis discos con capacidad para MP3.
La Durango se basó en el mismo chasis que la camioneta Dodge Dakota. Contaba con una posición de asientos de tres filas y una capacidad de asientos de hasta siete pasajeros. Sus habilidades todoterreno estaban limitadas debido al gran peso. En el lado de la transmisión, primero vino con una caja de cambios automática de 4 velocidades. Posteriormente se agregaron otra automática de 5 velocidades y una CVT para diferentes opciones de motor.
En 2007, se presentó un lavado de cara en el Auto Show de Dallas y se mostró al público un capó recientemente rediseñado. Las nuevas características incluyeron control electrónico de estabilidad, un sistema de monitoreo de presión de neumáticos, asistencia de estacionamiento trasero y una señal de giro de un toque.
A fines de 2008, la demanda del SUV grande disminuyó y en octubre se cerró la planta de ensamblaje de Newark donde se construyó el Durango. La crisis financiera mundial golpeó más al gran mercado de los SUV. En su último año de producción, como modelo 2009, Dodge promocionaba el primer Durango Hybrid, donde el gran motor V8 de 5.7 litros era ayudado por dos motores eléctricos de 65 kW.