El pequeño SUV Lincoln MKC se presentó en 2013 en el Auto Show de Los Ángeles como prototipo y las ventas del modelo de serie comenzaron en 2014.
Lincoln necesitaba moverse rápido y regresar al mercado de lujo. Dado que los clientes comenzaron a buscar SUV con más frecuencia, llegó el MKC. El vehículo se basó en la misma plataforma que Ford Escape/Kuga. Fue un gran esfuerzo traer de vuelta la marca Lincoln a la atención del público y detener el declive de las ventas y la imagen.

En el exterior, el MKC presentaba un diseño de ala para la parrilla delantera, con los faros extendidos desde sus puntas. Debajo, una amplia abertura en el parachoques delantero se extendía de lado a lado. Se instalaron tomas de aire adicionales. En la parte trasera, las luces traseras estaban unidas por una barra roja en el portón trasero. Se agregó escape doble para darle un toque final a los vehículos inspirados en el rendimiento.

En el interior, el vehículo de lujo cobró vida con un innovador diseño de tablero. El grupo de instrumentos era clásico, con dos diales grandes. En el lateral, había cinco botones para controlar la caja de cambios. No más palanca de cambios. En la columna central, estaba la pantalla táctil de 8” para la unidad de infoentretenimiento. El sistema de sonido fue mejorado por THC y para controlar los medios, Lincoln agregó el sistema MyLincoln Touch, que era compatible con Android Auto y Apple CarPlay.

Debajo del capó, el MKC presentaba una selección de dos motores turboalimentados de cuatro cilindros. La versión base presentaba una unidad de 2.0 litros, mientras que la otra opción era una de 2.3 litros. El primero se ofreció con 2WD, mientras que el sistema de tracción total era opcional. La versión más potente estaba equipada de serie con tracción total. El sistema de amortiguadores adaptativos se instaló de serie, así como la caja de cambios automática de 6 velocidades.