Galardonado con el premio Top Safety Pick + en EE. UU. por el IIHS, la segunda generación del Mazda más grande del mercado fue mejorada hacia el segmento premium.

Después de la ruptura con Ford en diciembre de 2008, Mazda se abrió camino en el mundo del automóvil con un nuevo diseño y sin restricciones utilizando motores y transmisiones ajenas. El Mazda 6 fue el comienzo de una nueva era y, con un nuevo diseño y la nueva tecnología SkyActiv, logró traer autos impresionantes al mercado.

El CX-9 fue uno de los vehículos que partió de la plataforma Mazda 6, pero fue construido como un SUV con tracción integral permanente. La fascia delantera se parecía a la SUV compacta CX-5 y, debido a una distancia entre ejes más larga, podía acomodar hasta siete pasajeros en el interior. El pilar A inclinado era más similar a una camioneta deportiva que a un SUV.

En el interior, los asientos delanteros eran más delgados para permitir un mayor espacio para las piernas de los pasajeros de la fila central. En la parte de atrás, había suficiente espacio para los niños. El Mazda CX-9 2016 vino con un sistema de infoentretenimiento con pantalla táctil Mazda Connect de siete u ocho pulgadas. También podría haber sido controlado con comandos de voz o una perilla de control. Se instaló una pantalla TFT adicional de 4,6” entre los indicadores, para el conductor.

Debajo del capó, el CX-9 presentaba un motor turboalimentado de 2.5 litros acoplado a una transmisión automática estándar de 6 velocidades. Se ofreció solo como tracción total.