Seat presentó la primera generación del Cordoba en 1993 y, tres años después, estaba disponible en versión familiar, denominada Vario.
Después de lanzar con éxito la segunda generación de la línea Ibiza, el fabricante de automóviles español presentó una versión de tres cajas llamada Córdoba. Compartieron la misma plataforma con el Polo. Pero el fabricante de automóviles alemán, que ya era dueño de la marca española, decidió posponer la versión familiar y lanzarla en 1996 junto con la versión renovada para toda la gama Córdoba.
En el exterior, la camioneta de segmento pequeño presentaba faros horizontales tipo Polo y una parrilla que parecía una sonrisa. Era su forma de mostrar un coche que podía mejorar la vida de las personas. El tiempo de las camionetas no había pasado, y un vehículo con suficiente espacio interior como un vehículo de tamaño compacto era una buena noticia. Si bien la parte delantera del automóvil era similar a la del Cordoba de tres cajas, después del pilar B, los diseñadores hicieron un techo más extendido y, detrás de los pilares C, colocaron un juego de ventanas cuadradas. No era una obra de arte muy imaginativa. Más como un trabajo de “pongámosle una mochila a esta cosa”. En la parte trasera, la camioneta presentaba una franja roja que conectaba las luces traseras montadas verticalmente.
En el interior, había un diseño de tablero sencillo, con una consola central que caía hacia el piso y un grupo de instrumentos pequeño y redondeado con diales VW Polo ligeramente rediseñados. Sus asientos delanteros eran sencillos y estaban montados bajos en la base para crear una sensación deportiva. En la parte trasera, el banco plegable era adecuado para dos pasajeros de tamaño adulto.
Debajo del capó, el Cordoba Vario más notorio estaba equipado con el nuevo motor diesel de 1.9 litros, turbocargado o no, del contenedor de repuestos de Volkswagen. Aparte de eso, el fabricante de automóviles ofreció el Cordoba Vario con una selección de tres motores de gasolina.