El ya icónico Beetle moderno se presentó al público por primera vez en 1998.
Volkswagen tardó 4 años en traer el tan esperado descapotable que resultó ser un gran éxito.

Basado en el Volkswagen Golf, el Beetle tenía un chasis muy rígido, que ofrecía una marcha suave con bajos niveles de NVH.

El elegante automóvil combinaba la ingeniería y el rendimiento alemanes con acabados asombrosos, por lo que el Beetle fue al menos una opción interesante.

Para 2003, Volkswagen ofreció el Beetle convertible con una opción de 3 motores: 2.0 litros, 1.9 litros y turboalimentado de 1.8 litros. El cliente puede elegir una transmisión manual o automática por una tarifa adicional.

Incluso con el nivel de equipamiento básico GL, el Beetle estaba bien equipado y ofrecía aire acondicionado, cierre centralizado con control remoto sin llave, un sistema de audio de 6 bocinas, un sistema antirrobo, frenos de disco en las cuatro ruedas, ABS, faros halógenos proyectores, espejos laterales con calefacción, control de crucero y elevalunas eléctricos.

Pasando a los niveles de equipamiento GLS, el Beetle presentaba llantas de aleación de 16 pulgadas, techo corredizo eléctrico, tapicería de cuero sintético y faros antiniebla.

El GLX, el tope de gama, agregó un alerón trasero activado por velocidad, un sistema de audio premium de 8 bocinas, un volante de 3 radios, boquillas lavaparabrisas con calefacción, limpiaparabrisas con sensor de lluvia y espejos retrovisores con atenuación automática .

En cuanto a la seguridad, el equipo estándar incluía bolsas de aire para el conductor y el pasajero delantero, bolsas de aire para impactos laterales, un sistema de tensión del cinturón de seguridad, ABS, ESP opcional, una columna de dirección plegable y otros.