Después de la crisis económica mundial, Peugeot-Citroen inició una nueva línea de sedanes de segmento pequeño, principalmente para los mercados emergentes: el Peugeot 301 y el Citroen C-Elysee.
El 301 se presentó en el Salón del Automóvil de París de 2012. El automóvil se construyó sobre una plataforma mixta con componentes transferidos de otros modelos en el almacén de Peugeot. En algunos países, el sedán era la opción familiar, mientras que los hatchbacks eran considerados para jóvenes imprudentes. Es por eso que el automóvil no se vendió en Europa Occidental, sino que encontró su participación en el mercado de Europa del Este, Turquía, África y América Latina.

El diseño era básico, con una parrilla sencilla y un capó esculpido donde se pegaba el escudo de Peugeot. Como detalle elegante, la palabra Peugeot estaba estampada en la parte superior de la parrilla. En el lateral, una línea ascendente esculpida era el único detalle que interrumpía los paneles de las puertas, lisos y ligeramente curvados.

En el interior, el 308 se ofreció con necesidades básicas, como aire acondicionado y una opción para ventanas eléctricas. A pesar de ser pequeño, el auto era lo suficientemente espacioso para cinco pasajeros adultos. El maletero era grande, con espacio suficiente para el equipaje de una semana. El respaldo del banco trasero se dividió y plegó en proporciones 60:40.

Para la transmisión, Peugeot ofreció la opción de motores de gasolina o diésel acoplados a una caja de cambios manual de 5 o 6 velocidades, según el motor. Una opción para una automática de 4 velocidades estaba en la lista de opciones.